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Utilización de una barreta hidráulica para la plantación de guías de álamos en los valles irrigados de Patagonia Norte
Resumen
El cultivo de álamos en la región de los valles irrigados del norte de la Patagonia estuvo históricamente ligado a la producción agrícola. Esta especie se utiliza principalmente formando cortinas rompeviento para proteger los cultivos frutihortícolas. El material más usado para su implantación es la estaca. Las forestaciones en macizo tienen por finalidad producir madera rolliza de calidad superior a la proveniente de las cortinas y suelen combinarse con
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El cultivo de álamos en la región de los valles irrigados del norte de la Patagonia estuvo históricamente ligado a la producción agrícola. Esta especie se utiliza principalmente formando cortinas rompeviento para proteger los cultivos frutihortícolas. El material más usado para su implantación es la estaca. Las forestaciones en macizo tienen por finalidad producir madera rolliza de calidad superior a la proveniente de las cortinas y suelen combinarse con otras actividades agropecuarias en sistemas agroforestales o silvopastoriles. En estos casos, para lograr mayor homogeneidad del cultivo se recomienda usar plantas de uno o dos años de edad, que se conocen como barbados, haciéndose los hoyos con pala de punta o con hoyadora agrícola. En algunas situaciones, tanto para cortinas rompeviento como para macizos, suelen plantarse guías o varetas de un año de edad, conocidas en la región como “varillones”. En base a experiencias anteriores, para plantar un macizo a una densidad de 555 pl/ha. (6 m x 3 m) con guías de Populus x canadensis ‘Guardi’, se utilizó la barreta hidráulica que consiste en un caño perforado de 1,5’’ unido a una manguera y conectada ésta a la pulverizadora. Mediante este sistema, a través de la presión del agua, se obtuvieron hoyos de 60-70 cm de profundidad y de escaso diámetro en el que se colocaron los varillones. Este sistema permitió alcanzar una adecuada profundidad de manera práctica y sencilla, además de proporcionar humedad necesaria en la porción de suelo que está en contacto con el varillón. La cuadrilla para
realizar esta tarea estuvo compuesta por dos personas: un tractorista, quién además hizo los hoyos, y un plantador. El tiempo operativo de la plantación, para filas de 44 plantas, fue de 25 minutos por fila, y el de carga de 900 litros de agua en la pulverizadora fue de 40 minutos. Con cada carga de agua se plantaron 3 filas. Fueron necesarios 4 jornales por hectárea para realizar la plantación. La barreta hidráulica es una herramienta alternativa para la plantación de álamos y sauces en esta región ya que, ante la escasa disponibilidad de barbados, posibilita utilizar guías como material de plantación.
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Fuente
Jornadas de Salicáceas 2011 y 3º Congreso Internacional de Salicáceas. CNA. Neuquén, 16 al 18 de Marzo de 2011
Fecha
2011
Editorial
Comisión Nacional del Álamo (CNA)
ISSN
1850-3543
Formato
pdf
Tipo de documento
documento de conferencia
Palabras Claves
Derechos de acceso
Abierto
